Unos 21.000 docentes hicieron consultas por estrés y fatiga
Atribuyen los casos a la violencia escolarLA PLATA.- Más de 20.000 docentes bonaerenses, que dictan clases en las 18.000 escuelas públicas que tiene la provincia de Buenos Aires, padecen algún tipo de enfermedades psicosociales vinculadas con la violencia escolar, como estrés y fatiga, entre otras patologías. 'Las enfermedades psicosociales hoy se han equiparado con los trastornos clásicos que tenía la profesión, como los problemas derivados del uso excesivo o inadecuado de la voz y el agotamiento', advirtió la presidenta de la FEB, Mirta Petrocini, en diálogo con LA NACION.
El estudio del gremio docente se difundió a una semana de que se exhibieran un par de videos captados con teléfonos celulares que mostraban a dos grupos de alumnos maltratando a una docente bonaerense y otra maestra porteña en dos escuelas públicas, con burlas y actitudes groseras y displicentes.
En ese contesto, el informe de la FEB señala que la tarea docente se transformó en una 'profesión de riesgo' y advierte que si la tendencia persiste en el tiempo, en 10 años, las manifestaciones psicológicas provocadas por estos males serán la causa del 50% del ausentismo docente en los colegios bonaerenses.
Petrocini aseguró que pedirá la incorporación de los tratamientos de estos síndromes y enfermedades en la cobertura de las obras sociales, en especial el IOMA, al que están afiliados en forma 'compulsiva' todos los maestros. 'Estas situaciones deben alentarnos para la búsqueda acelerada de metodología para comenzar a actuar en la evaluación de los factores de riesgo psicosocial', dijo la dirigente gremial.
En el informe, Daniel Tineo, a cargo del área Salud Ocupacional de la FEB, explicó que cuando se habla de riesgos psicosociales se refiere a una serie de alteraciones psicofísicas experimentadas por el docente, que se traducen en 3 o 4 fenómenos o síndromes.
'Los maestros pueden estar alcanzados por fatiga psíquica; estrés ocupacional; síndrome de Bournout, también conocido como el docente «quemado por el sistema»; y el hostigamiento psicológico-laboral o acoso laboral o mobbing. ' El maestro fue formado en otra sociedad.
Hoy, la familia está fragmentada y los padres y docentes han perdido la autoridad. Nosotros tratamos de brindar apoyo y contención al docente, y para eso creemos que es mejor exigir mejoras en las condiciones laborales de los maestros', explicó.
'El docente, además de enseñar, tiene que luchar con problemas de infraestructura, aulas repletas, tomar más cargos porque no le alcanza la plata que gana y, además, darles contención afectiva a los alumnos. ¿Cómo se puede evitar que no surjan problemas psicosociales?', se preguntó Capone.
Por Jesús A. Cornejo La Naciòn, 15 de julio de 2008
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