Las habilidades comunicativas de un médico influyen, de manera decisiva, en el modo en que el paciente aborda su problema de salud. No todos los médicos saben transmitir una mala noticia al paciente o al familiar. Por ejemplo, un diagnóstico de cáncer. Saberlo hacer es clave, incluso, para que la persona afronte mejor la enfermedad.
El médico ha de estar relajado y tranquilo. No hace falta dar todas las noticias de golpe, ya que, en el momento en que se menciona la palabra cáncer, el paciente empieza a pensar en la vida y la muerte. Es muy importante que en ese momento haya un familiar cercano, ya que muchas veces el paciente no llega a oír el resto del diagnóstico,sólo la palabra cáncer.
En ese momento es muy importante la relación que se establece entre médico y enfermo. Si esta relación va mal, el tratamiento irá mal y habrá una pérdida de confianza.
El médico tiene que reconocer sus limitaciones. Por eso, a veces se debe recurrir a personas que dominen el arte de la comunicación. Se imparten cursos que enseñan las mínimas habilidades de empatía y cómo transmitir la noticia; hay saber distinguir entre cada tipo de familia.
Se debe tener en cuenta la edad del paciente, no es lo mismo un paciente de 40 años que uno de 70. Sin mentir, hay que tener un poco de psicología. A una persona de 70 -80 años, que asocia la palabra cáncer con muerte, se le puede explicar que tiene un tumor.
El médico debe tener empatía y ponerse en el lado del paciente o familiar. Sí se sigue el ejemplo de la escuela americana, donde el médico da el diagnóstico de una manera brusca, no es la manera adecuada de aproximarse.
Se debe dar la noticia en un ambiente relajado.
Se debe dar la noticia en un ambiente relajado.
El médico ha de estar relajado y tranquilo. No hace falta dar todas las noticias de golpe, ya que, en el momento en que se menciona la palabra cáncer, el paciente empieza a pensar en la vida y la muerte. Es muy importante que en ese momento haya un familiar cercano, ya que muchas veces el paciente no llega a oír el resto del diagnóstico,sólo la palabra cáncer.
En ese momento es muy importante la relación que se establece entre médico y enfermo. Si esta relación va mal, el tratamiento irá mal y habrá una pérdida de confianza.
El médico tiene que reconocer sus limitaciones. Por eso, a veces se debe recurrir a personas que dominen el arte de la comunicación. Se imparten cursos que enseñan las mínimas habilidades de empatía y cómo transmitir la noticia; hay saber distinguir entre cada tipo de familia.
Se debe tener en cuenta la edad del paciente, no es lo mismo un paciente de 40 años que uno de 70. Sin mentir, hay que tener un poco de psicología. A una persona de 70 -80 años, que asocia la palabra cáncer con muerte, se le puede explicar que tiene un tumor.
(para leer y re-leer)
1 comentario:
Mónica pues yo soy de la opinión de que se debe decir y punto, por supuesto sin brusquedad, cuando mí me dijeron que tenía cáncer de hígado (mi marido murió de Cirrosis) lo ví tan natural... cad uno sabe qué tipo de vida ha llevado y sus consecuencias...
Un abrazo mi niña y que tengas una linda semana,
PD: visítame en:http://rosscanaria.WordPress.com
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